martes, 16 de septiembre de 2014

Historias de extranjeros en España


La historia de Fernando es la de muchos argentinos que todavía están en España. El llegó promediando la década del 70, cuando luego de publicar artículos en medios escritos cordobeses, lo invitaron a irse del país o tendría problemas. No lo pensó mucho, vivía en Córdoba y estaba muy bien, pero era una cuestión de vida o muerte.
“Llegué a Barcelona con 100 dólares en el bolsillo”, me decía luego de contarme que había viajado en barco desde nuestro país. En esos momentos tenía 22 años y toda la vida por delante. Tuvo tiempo de enamorarse de una sueca, luego recaló en el sur de España para formar nueva pareja. Separado y con dos hijos grandes, vive en Sevilla.  
“Vuelvo siempre a Argentina, tengo hermanos, sobrinos, tengo familia allá. La próxima Navidad estaré por Córdoba. Me ofrecieron volver y trabajar allá en radio, o escribiendo artículos en medios periodísticos, pero ha pasado tanto tiempo que no puedo opinar sobre Argentina. Si bien vuelvo y me cuentan, no viví muchas cosas que pasaron”, comentaba Fernando.
Y hablando de cómo se siente al volver, él decía muy convencido : “La verdad es que me siento un extranjero en mi país. Amo a la Argentina, y me gustaría poder insertarme, pero ya no puedo”. Palabras duras de Fernando que retumbaron en mi cabeza.
Andando por España he conocido otros extranjeros, de muchas nacionalidades distintas. En estos días me crucé con un hombre nacido en Gambia, un país subsahariano, de esos que hay que buscarlos en el mapa para saber donde están. Y este hombre de color, vendiendo unas artesanías de madera me decía que hace 9 años que está aquí. Seguramente cruzó a España en los famosos “chiringuitos”, unas barcas atestadas de gente que a veces llegan a la costa y algunos logran quedarse, otras veces llegan con la mitad de la gente, o a veces se hunden en el océano sin sobrevivientes. Aquí ya no es noticia esta gente que intenta llegar a Europa como sea, escapando de sus países.
También encontré un colombiano, José Luis, que hace 25 años está en Madrid, ahora trabajando de mozo. “Ya me vuelvo en un par de años. Invertí en bienes raíces todo lo que iba ganando con el trabajo. Mis hijos están aquí y ubicados. Quiero volverme a Colombia a tirarme en una hamaca y disfrutar de la vida”, me decía sonriendo.
Debo decir que en los bares trabajan como meseras mujeres que vienen desde Republica Dominicana como Rocío, hasta de Cuba como Julia, todas buscando un futuro mejor al que tenían en su país.
Y por último, cómo no iba a encontrar una parrilla argentina. El Gaucho se llama, todos platos de nuestra tierra, buena carne, empanadas, y hasta se puede tomar un fernet con coca. Alberto, el encargado, hace 25 años que está en Madrid. Comenzó con una panadería, y ahora está al mando de esta sucursal que está a metros de la Puerta del Sol. Hablamos de política, de la crisis española que es muy distinta a lo que nosotros llamamos crisis, y por supuesto de fútbol también.

Historias de extranjeros que han hecho su vida en España, algunos volverán, otros no, pero todos han dejado parte de su vida en otras tierras buscando un futuro mejor.

El Mundial para Europa, el Campeonato para América


Asistimos a una Copa del Mundo donde los equipos de Europa dominaron al resto de los continentes, pero el título quedó en America. Y quedó en nuestro continente porque Estados Unidos sigue teniendo equipos sumamente poderosos, superiores al resto por varios cuerpos, ya que ningún país le hizo sombra. Fue un mundial muy desparejo en ese aspecto y de antemano se sabía que sólo España le podía jugar de igual a igual, ya que lo había demostrado en las últimas dos olimpíadas, incluso ante equipos estadounidenses más fuertes que el que vino a tierras españolas.
Pero, luego de la eliminación española a manos de Francia, en lo que fue un “Maracanazo del Basquet”, todo se le simplificó al equipo estadounidense para llegar sin inconvenientes al título.
Ni Serbia ni Lituania pudieron hacerle partido, solo de a ratos pareció que podían competir con ellos, pero cuando los americanos apretaban el acelerador, terminaban sacando una ventaja indescontable.
El equipo de Francia debe irse contento, fue épico el partido ante España, estuvo cerca con Serbia y luego se coronó tercero al vencer a Lituania. Que hubiera sido si estaban completos con Tony Parker y Joakim Noah. No lo sabremos, pero hubiera sido una buena final entre franceses completos y norteamericanos.
El Brasil de Magnano hizo un buen torneo, se sacó la espina de Argentina y le ganó claramente, pero luego no pudo aprovechar la oportunidad de llegar a donde merece de acuerdo a lo que juega en la fase previa. Todavía le pesan los partidos que son a vida o muerte. Otros dos invitados como Grecia y Turquía tuvieron buenas actuaciones, sobretodo los griegos que ganaron la zona invictos, lástima que se cruzaron temprano con Serbia que fue el mejor del mundo FIBA.
El resto de los equipos americanos no tuvo un buen torneo, al igual que Argentina que fue incompleto y a esta altura de su historia le pasa mucho la ausencia de ciertos jugadores como Ginóbili y Delfino. Ya comenzó el recambio de lo que queda de la Generación Dorada, y se verá en el futuro si sus jugadores jóvenes podrán honrar los logros obtenidos en la última década. En este torneo no se cumplieron los objetivos desde el punto de vista de los resultados, fue menos de lo esperado. Ojalá haya servido para ir generando un nuevo equipo para el futuro. 
En el parquet vimos grandes jugadores como Teodosic, Batum, Irving, Diaw, Valanciunas, Raduljica, Harden, Bjelica, Curry, Pau Gasol, Prienteziz, entre muchos otros, lo cual fue un lujo para los amantes del basquetbol.
El final fue con el público español cantando por España, con los serbios festejando en medio de la cancha, y los norteamericanos contentos porque cumplieron con lo que debían hacer, dejar en claro que siguen siendo los mejores del mundo.

Para mí fue una nueva experiencia mundialista, el segundo Mundial que cubro para La Voz de San Justo y AM1050, momentos que quedan en mis retinas y que seguramente, de una manera u otra, he logrado transmitir para hacerles vivir de cerca una gran Copa del Mundo, esa que a partir de mañana habrá que esperar cinco años para volver a sentir  abrazados a los colores argentinos, pero por sobretodo a los colores del básquet.


Estados Unidos le dio un paseo a Serbia


Demasiada fue la diferencia entre uno y otro. Serbia no fue rival para un equipo estadounidense que tuvo altos porcentajes de campo, una puntería contra la que no se puede plantar batalla, menos aún si no hay una fuerte estrategia defensiva para contener tanta capacidad.
El partido y la paridad, hasta una inicial supremacía serbia si se quiere, duró solamente 5 minutos. A partir de allí los americanos comenzaron a convertir desde larga distancia especialmente de la mano de Kyrie Irving, finalmente MVP, fueron ampliando diferencias y al poco tiempo encaminaron el partido hacia la victoria.
El equipo de Serbia logró buenas conversiones ofensivas, ingresaba en la zona, les volcaba la pelota, convertía desde afuera, pero por uno de ellos, los norteamericanos anotaban dos, lo cual nunca es negocio.
Defensivamente Serbia no le hizo fuerza, un poco por la categoría de los estadounidenses y otro tanto porque no lo supieron hacer, les quisieron jugar de igual a igual y eso no funciona ante un equipo con tanta capacidad ofensiva.
Hubo volcadas, tapas, jugadas individuales de gran factura, pases profundos, hubo show y eso mantuvo al público entretenido por más que el partido se había terminado hace rato. Y el show vino de ambos equipos, eso fue lo interesante.

El festejo final de los serbios que no se querían ir de la cancha, levantando los brazos hacia su gente, fue un fiel reflejo de lo conformes que estaban. Los norteamericanos también festejaron, porque era un peso para ellos salir campeones y si bien se saben superiores, los primeros minutos los sufrieron. Después, hicieron todos los lujos ofensivos posibles, se divirtieron, se florearon, y le dijeron al mundo que por más reyes que haya en Europa, ellos siguen siendo los reyes del baloncesto. 

domingo, 14 de septiembre de 2014

Una final con dos equipos históricos

MADRID,(Por Diego Favot, enviado especial).-

No será esta la final esperada por todos ni a la que intentó llegar la organización con la forma de disputa y la distribución de las zonas. La de hoy es la final que se decidió dentro del parquet, en ese rectángulo donde un grupo de jugadores en un cinco contra cinco intentan meter la pelota en el aro, la esencia del básquetbol.
Se enfrentan el favorito de todos, Estados Unidos, ante un histórico de siempre si tenemos en cuenta que Serbia era parte de la Yugoslavia del Mariscal Tito.


Los estadounidenses han ganado todos sus partidos por amplia diferencia, definiéndolos a mas tardar en el tercer cuarto si el partido venia parejo. Su juego tiene mucho de atlético, son muy físicos y desgastan a los rivales, por eso también pueden acelerar a partir de la segunda mitad. Sus armadores, los consagrados Kyrie Irving y Stephen  Curry son grandes figuras, que alimentan al barbado James Harden. Bajo las tablas su poderío se basa en los rebotes de Kenneth Faried y Anthony Davis, aunque como indicaba anteriormente, todos juegan en este equipo estadounidense.
Por el lado de Serbia, su estrategia debería pasar por frustrar a los estadounidenses la mayor parte del tiempo que sea posible, ir fastidiándolos hasta que comiencen a buscar acciones individuales desde posiciones exteriores o intentar salvar ellos a su equipo. La defensa de los balcánicos ha sido buena en el torneo, sobretodo en los partidos de cruces, y ofensivamente su hombre pensante Milos Teodosic deberá estar encendido, tanto convirtiendo desde posiciones externas como generando juego para Raduljica y Krstic bajo las tablas, asi como asistiendo a sus laderos Bjelica y Bogdanovic.
El equipo serbio fue creciendo con el correr del torneo, perdió tres partidos en la fase previa, pero después fue bajando candidatos y demostró ser el mejor finalista del mundo FIBA. Se enfrentará a un equipo totalmente NBA, no con las grandes estrellas pero sí con mayoría de jugadores que sobresalen en sus equipos.

No es la final soñada, es la final de los dos mejores equipos del torneo, y hoy el ganador escribirá su nombre como Campeón del Mundo, un trofeo con el que sueñan todos y sólo uno se lo llevará a su tierra.  

sábado, 13 de septiembre de 2014

Una mañana en el Hotel Ritz de Madrid

MADRID,(Por Diego Favot, enviado especial).-

Una mañana diferente fue la de ayer, ya que a mis intenciones de volver al Museo del Prado las cambié por una entrevista con Horacio Muratore, el nuevo presidente de FIBA, un tucumano que llegó a lo máximo que puede aspirar un dirigente a nivel mundial, y de un deporte tan importante como el básquet. Su simplicidad y predisposición me asombran constantemente, nunca perdió la capacidad de escuchar y hablar con todos.

Lo divertido fue mi ingreso al Hotel Ritz de Madrid, un hotel 5 estrellas de lujo de esos en los que creo nunca llegaré a alojarme, a saber, 4.500 pesos la noche la habitación doble más barata. Autos importados afuera, un par de “botones” vestidos de etiqueta y sombrero en el ingreso marcan la categoría del lugar. Adentro mucho lujo, juegos de sillones para poder sentarse y charlar, todo alfombrado, ambientes muy amplios.
Yo, mochila al hombro, entré como si ya me conocieran, te saludan, y nadie te pregunta nada. Me senté en el “lobby” en una silla estilo antiguo, muy acolchada, y cada tanto pasaba una camarera y me preguntaba  si quería tomar algo, si estaba todo bien, qué necesitaba. Nunca aclaré que estaba haciendo ahí y nadie me preguntó, me sentía un excéntrico millonario que andaba con jeans y una mochila.  Luego, entiendo, cuando me vieron dialogando con el presidente de FIBA ya no había nada que explicar.
Por las dudas, nunca solicité ni un vaso de agua, no vaya a ser que en lugar de cortesía de la casa hubiera que “rascarse” el bolsillo y dejar varios euros sobre la mesa. Lo que sí, al retirarme, había una champañera con varias botellas espumantes y unas copas, listas para ser servidas. Eran las 11 de la mañana eh… No hubo tentación que valga, después de todo, disfruté de lo mío, unas horas donde me sentí un “bacán” en un hotel de gente con mucho dinero.
A partir de allí volví a mis paseos por los parques madrileños como el Parque de El Retiro, un hermoso espacio verde con un lago y varios monumentos de reyes. Lindo lugar, similar a los nuestros solo que con un toque europeo.  

Un lujo que se dan los madrileños y los visitantes de poder disfrutar un lugar así en plano corazón de Madrid, muy cerca de las Cibeles y del Museo del Prado, éste que cambie por una mañana de rey en un hotel para millonarios.

Teodosic los depositó en la final

MADRID,(Por Diego Favot, enviado especial).-

Un estadio casi repleto disfrutó de unos minutos finales electrizantes, propios de una semifinal del mundo entre dos potencias. El festejo final de los serbios fue una demostración clara de lo que les costó llevarse la victoria y el pasaporte a la final.
Las banderas con los mismos colores y las hinchadas muy bulliciosas en la presentación de los equipos hacían suponer un juego peleado y parejo. Nada de eso ocurrió durante el desarrollo del mismo excepto sobre el final. Ese final que nadie esperaba y que solo creía en ello el francés Batum. Una andada de triples los puso injustamente en juego, y  Serbia lo aguantó jugando ofensivas, ya que defensivamente no podía con Francia y su puntería. 

Desde un comienzo Francia no fue el mismo que ante España y lo pagó caro, porque enfrente estaba Serbia que jugó muy bien, al igual que en todos los partidos definitorios anteriores como ante Grecia y Brasil. Jugó buenas defensas, nada vistosas pero efectivas, y en ataque la categoría de Teodosic fue demasiado para estos franceses que lejos estuvieron de lo demostrado la jornada anterior.
Pero el básquet y el partido les dieron una oportunidad sobre el final, que estuvieron cerca de tomar si no fuera por la capacidad basquetbolística de su oponente.
Merecida victoria Serbia que fue manejando el partido a su antojo, y cuando Francia se vino en el último cuarto, lo aguantó jugando con inteligencia, esa que tiene su  entrenador Djorjdjevic que planificó el juego y tomó las decisiones correctas, justas para evitar una victoria francesa que sería una catástrofe después de todo lo que había hecho Serbia durante el juego.

El festejo final del equipo serbio, con las mascotas incluidas y su ferviente hinchada enfrente agitando sus banderas, sólo fue interrumpido por un grupo de españoles que cantaban “¡Orenga dimisión!, ¡Orenga dimisión! ”, pidiendo la cabeza del entrenador español, lo único que pueden cantar desde la tribuna cuando la final entre EEUU y Serbia la vean por televisión.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Entre pintores y grandes escenarios


Luego de la eliminación argentina, momento triste si los hay, y después de un día de descanso, de reacomodar la mente y los sentimientos, decidí salir a conocer un poco más de Madrid, tal como lo han hecho la mayoría de los colegas argentinos. Algunos incluso se estarán volviendo y otros han tomado diferentes rumbos para conocer lugares de Europa a los que siempre será muy difícil volver.
Yo me quedo en Madrid y mi primer visita fue al Museo del Prado, un lugar donde hay pinturas españolas y de las buenas. Si bien no soy un gran amante de este tipo de artistas del siglo XVI al siglo XIX, debo reconocer que saqué unas cuantas conclusiones.
He visto muchas pinturas de reyes, condes, duquesas, gente de dinero que se hacía pintar para lucirse. Y ahí fue mi primera conclusión : qué feos que eran en aquellas épocas. Por suerte, la especie fue mejorando, o quizás la belleza pasaba por otro lado.
La religiosidad de esos tiempos también es notable, donde muchos motivos tienen que ver con eso, lo que también me lleva a pensar lo importante que era decorar las iglesias con imágenes de grandes artistas, cuando hoy en día apenas si alcanza para mantener lo que ya está hecho.
Entre lo más conocido que vi fue “La maja desnuda” de Goya, aunque también a su lado estaba “La maja vestida”. Pero, ¿por qué la pintura famosa fue la de la mujer sin ropas?. Serán cuestiones de sombras y colores, ¿ o tendrá que ver con lo que hoy también vende en los medios audiovisuales? 
Allí dentro esta prohibido sacar fotos, y si te “pillan”, bien mal la vas a pasar. El que me divertí fui yo, cuando observé a una señorita tomando una foto a escondidas con su celular. Mi chistido, el clásico “¡ch, ch, ch !”, hizo asustar a la dama y huir de la escena con preocupación y temor a ser descubierta. Sonrisas de mi parte que nunca descubrió.
Para finalizar la tarde me fui al Estadio Santiago Bernabeu, donde de entrada impacta ver una gigantografía con la frase “Gracias Alfredo” y una foto del ídolo igual de grande. Después por dentro es muy interesante la recorrida, solo que no es con un guía, la hace uno solo y va viendo distintas galerías de fotos y videos, vestuarios, vistas desde la platea. Todo eso para terminar el recorrido accediendo al campo de juego por el túnel de los futbolistas. Un lindo paseo para los amantes del futbol, y para los colombianos que eran muchos, y todos venían para ver a su James querido, nuevo ídolo nacional.

El día fue rendidor en materia turística, me llené el alma viendo grandes pintores y me llené los ojos viendo un gran escenario deportivo.


La pintura española en El Prado


La decisión de visitar un museo tan famoso, uno de los más conocidos del mundo como el Museo del Prado en Madrid, no es nada osado ni de otro mundo, es más, es una de las visitas turísticas que hay que hacer en la capital española.
Lo interesante de este museo es que están todos los pintores españoles desde el año 1500 al año 1800, los mejores y los más famosos de esas épocas. A estos los complementan diversas obras de pintura alemana, francesa, flamenca, italiana, británica y holandesa.
No pensemos que hay que ser un experto en pinturas para ello, tampoco tiene porqué gustarnos el arte de colorear un lienzo. En un lugar así se descubre la vida en la época medieval, podemos saber por donde transcurría la historia en aquellos lejanos tiempos de reyes, cortes, doncellas y bufones. Y la religiosidad y la importancia del cristianismo, sin dejar de lado tampoco creencias mitológicas.
Todas esas imágenes llaman la atención, y en mi caso particular, trasladándolas a nuestros días, se puede llegar a hacer una comparación y relacionarlas de alguna manera.
En aquellas épocas la gente se retrataba, contrataba un pintor para que inmortalice su figura y la magnifique. Seguramente no era lo mismo que te pinte un Diego Velázquez que un don nadie, y eso a nivel social daba relevancia. Por su puesto que sólo lo hacía la gente de mucho dinero. Hay reyes, condes y duquesas, mucha realeza ilustrando momentos importantes de sus vidas, o la clásica pose familiar, que en nuestros días llamaríamos la foto familiar luego de una reunión o de un cumpleaños. Y hasta famosos autorretratos de pintores que hoy llamaríamos una “selfie”, ¿ o no sería algo así ?.
Claro, en esas épocas no existía la fotografía, entonces la pintura cumplía ese rol. Como el de los grandes cuadros o murales inmortalizando batallas, capitulaciones de alguna ciudad conquistada o ciertos momentos de la vida cotidiana de una ciudad, como juzgamientos en época de la Inquisición en plena Plaza Mayor de Madrid.
Muchas obras también han sido rescatadas de conventos o iglesias importantes, ya que por encargo de la iglesia o de benefactores importantes, se pintaban imágenes de la vida de santos, santas, vírgenes, ángeles y momentos bíblicos,.
Aquí encontramos obras como “El caballero de la mano en el pecho” de El Greco, “La Inmaculada Concepción” de Tiepolo, “Las tres gracias” de Rubens, “Las meninas” de Velazquez, “La maja desnuda” de Goya, las cuales son muy conocidas y les llegan a los visitantes. En fin, el arte también es cuestión de gustos, y eso es muy personal, por más que quienes conocen de ello nos den todas las explicaciones de porqué una pintura es tan destacada y reconocida.

Darse una vuelta por el Museo del Prado es vivir nuevas sensaciones, es despertar sentidos ocultos y abrir la mente, es pensar en otros tiempos y conocer la historia, esa que a veces nos cuentan los libros y otras veces nos la cuentan estos grandes artistas con un simple pincel y acuarelas de colores.

lunes, 8 de septiembre de 2014

Y Brasil escribió la historia


La sensación de la derrota en estas instancias tempranas es dolorosa. Lo sentimos quienes estuvimos en el estadio, más aun luego de un primer tiempo que invitaba a soñar con una victoria. Los nervios se comieron a los dos equipos en esa primera etapa, solamente que Argentina tuvo en Prigioni una vía importante de gol y Brasil no embocaba el aro. Fue un momento donde el peso de un partido tan decisivo los paralizó a ambos, y en eso estuvo un poco más certero nuestro equipo.
Lamentablemente al comienzo de la segunda parte se le cerró el aro a los jugadores argentinos, que durante varios minutos no convirtieron, Scola falló cuatro libres seguidos y eso hizo que Brasil vaya tomando confianza y de a poco fuera avanzando en el marcador para aplastar a un equipo nacional que se fue desdibujando hasta terminar de rodillas.
Y en los minutos finales Brasil fue un carnaval, porque se floreó y convirtió todo lo que no había podido al comienzo del partido. La táctica empleada por Rubén Magnano siempre fue la correcta, solo que al comienzo el nerviosismo de sus jugadores no la llevaron a buen término.
Esta vez, los nervios terminaron traicionando a Argentina, que le dio vida a Brasil en un momento clave y este rival no lo desaprovechó. Y nos propinó una derrota que hará historia, una derrota que fue un mazazo para los jugadores importantes de este equipo, esos que no tuvieron una buena noche. Scola habló después pero en un momento se quebró y no quiso más. El entrenador nos decía que este era su último partido como entrenador nacional. Se vendrá un nuevo proceso en esta selección. Una derrota así golpea a cualquiera y genera cambios, que seguramente vendrán bien de cara al futuro.

Se esta vaciando el estadio en estos momentos, se escuchan solo unos pequeños ruidos a los que inunda el silencio, ese que viviremos cuando vayamos a descansar y nos sintamos vacíos, porque esta vez con la garra no alcanzó, porque esta vez la historia la escribió Brasil y nos dejó fuera del Mundial.

domingo, 7 de septiembre de 2014

Palabras de Anderson Varejao



En la tarde de ayer La Voz de San Justo tuvo la posibilidad de hacerle varias consultas a Anderson Varejao, jugador de Cleveland Cavaliers de la NBA y uno de los hombres fuertes de Brasil, sobre quien descansan gran parte de las esperanzas para vencer a nuestra selección en el día de hoy.

- Anderson, ¿cómo está Brasil para el partido contra Argentina?
- La verdad que vamos bien, tenemos confianza en nuestro equipo y creemos que le podemos ganar a Argentina.

- ¿Están en la memoria de ustedes los últimos partidos que jugaron ante Argentina?
- No hay que pensar en eso, cada partido es una historia nueva y es así que tenemos que pensar.

- ¿Hubieran preferido otro rival que no sea Argentina?
- No … mira, cuando vienes a una competición como esta para ganar tienes que jugar contra todos,  nos toca Argentina ahora y tenemos que ganarle.

- ¿Cuáles crees que son las fortalezas que tiene Brasil para enfrentar a Argentina?
- Yo diría que todo el equipo, todo el mundo habla de nuestro juego interior pero necesitamos de los 12 jugadores para ganarle a Argentina. Con juego interior solamente no vamos a ganar, sabemos de nuestro potencial pero el equipo tiene que estar bien.

- ¿Quién va a defender a Scola para que no haga tantos puntos ?
- (Risas…) No se, ya veras mañana

- ¿Te tocará a vos?
- Ya veras mañana …


Y se escapo riendo por la osada consulta, moviendo ágilmente sus 2,11 mts. y sacudiendo como resortes sus  ensortijados cabellos. Como dijo Varejao, mañana veremos en cancha como se deshacen de la pesadilla de Luis Scola.  

sábado, 6 de septiembre de 2014

Un día romano y andaluz


Ayer me levante tarde ya que el partido entre Argentina – Grecia y el trabajo posterior, más la cena muy tardía cambiaron la rutina diaria.
En la zona donde me alojo, llamada la Alameda de Hércules, habían estado promocionando una Feria Romana, cuestión que era digna de visitar. El lugar elegido era el correcto, ya que en los extremos de la plaza oval, similar a un hipódromo de las épocas romanas, se encuentran dos columnas romanas de aproximadamente 20 metros de altura, resabios y restos arqueológicos del paso de los romanos por estas tierras, que fueron parte del Imperio Romano cuando el mundo conocido en las épocas de los Césares era todo de ellos, el imperio era el mundo. Y Sevilla era parte importante de él por la una cuestión de posición estratégica.
Esta zona de la Alameda fue bautizada por el grupo de periodistas cordobeses como “la cancha de rugby”, por las columnas que parecían las “haches” y hacia allí partí para ver de qué se trataba la cuestión.
Una serie de puestos de artesanías, especias, hierbas aromáticas y un patio cervecero, con vendedores vestidos con trajes de las épocas romanas, producidos para la ocasión. Y al final del paseo, donde están las históricas columnas, un escenario. La música egipcia ingreso a mis oídos y mi curiosidad pudo más. Me acerqué y con un fondo de escenografía ambientada con hojas de palmeras, tapices y almohadones, unas mujeres ensayaban danzas de otros tiempos, épocas donde la dominación romana también había tocado la tierra de los faraones. Y allí estaba Cleopatra, abanicada con plumas por sus sirvientas.
Al comenzar el baile de una de sus sirvientas, descubrí en ella y después de tanto andar por estas tierras andaluzas, los famosos ojos moros, esos de los que hablan los “cantaores” de estas tierras. Y si bien fueron solo unos segundos, pensaba … “mirá donde vengo a encontrar lo que buscaba antes de comenzar el viaje, el saber del embrujo de esos ojos y lo que producen en artistas de la guitarra que le cantan a la “mujer grana”, a la mujer de los ojos negros”.
Y ella cómplice me guiño uno de sus oscuros faroles, como sabiendo de la atracción de sus ojos, mucho mas que cualquier otra danza corporal, porque aquí en Andalucía los ojos moros inspiran hasta al poeta mas mediocre, hasta al cantor que solo sabe rasgar las cuerdas y de lo único que habla es del embrujo de esa mirada. 



jueves, 4 de septiembre de 2014

Un sabor agridulce


La gente que vino a alentar a Argentina termino aplaudiendo al equipo en el último minuto, cuando todo estaba ya sentenciado. Nuestra selección no hizo un buen partido, pero sobre el final, cuando parecía que Grecia tenía todo controlado, se acercó a solo dos puntos, y dio la sensación que podía darlo vuelta. Eso represento el aplauso final del público, el esfuerzo por remontar un juego difícil en todo momento.
Ahora bien, para dejarlo bien en claro, el de ayer fue un partido que no tenia grandes implicancias, donde los dos equipos estaban clasificados y ninguno caería por la llave de España. Eso le quitó presión al juego y si bien ambos quisieron ganar, no fue un partido a muerte ni mucho menos. Eso no quiere decir que no hayan jugado a ganar ambos conjuntos, sino que las urgencias no estaban.
Quizás por eso, y tratando de hacer un juego no tan físico, Argentina no defendió como ante Senegal. Fue liviano al comienzo y eso influyo en el ritmo del partido. Grecia se aprovechó de la situación, tomo muchos rebotes y saco diferencias. Y nuestro equipo siempre estuvo corriendo desde atrás en el marcador.
Y quizás por cierta impotencia, además de los finos fallos arbitrales, el partido se fue calentando. Y explotó con Campazzo y Zisis sobre el final del primer tiempo cuando después del incidente ambos equipos se volvieron para intervenir. Luego también Scola cometió una falta fuerte y tuvo discusiones subidas de tono con Bourousis.
Ahí también quedó claro que Argentina no estaba jugando bien, se sentía incómodo,  pero de todos modos quería llevarse la victoria, esa que no estuvo tan lejos cuando con una ráfaga levantó el juego y se puso a tiro. Pero los griegos no flaquearon en el cierre y ante un par de errores ofensivos del equipo albiceleste, facturó y se alejó.

No había tiempo para más, solo para recibir los aplausos del público presente y empezar a pensar en Brasil, ese duelo sudamericano que se repite en los últimos torneos y que hasta ahora Argentina los resolvió con una victoria. 

De adivinadoras y de mateos


Hoy paseando por el centro de la ciudad, mirando hacia abajo y tratando de setear la cámara para sacar una foto, me encontré con una mujer que me ofrecía como unas plantitas, me decía que era un regalo y me lo ponía en la mano. Entre el calor y el sol del mediodía estaba un poco aturdido y me costo reaccionar. Hasta que le vi un jarrito que sostenía con el brazo en su cintura… Claro, era el viejo truco de las mujeres que te leen el futuro y después, mas que leerlo, te dejan sin tu futuro almuerzo, porque se quedan en un abrir y cerrar de ojos con tus pesitos destinados a comprar un sándwich o una cervecita.
Cuando levante la vista mis compañeros habían huido, estaban fácil a 30 metros, y esta mujer ya me estaba tomando de la mano, colocando la palma hacia arriba para leerme la suerte.
Mi reacción fue rápida por suerte, recogí mi mano y escape caminando a toda velocidad mientras la mujer me decía: “Ven, que solo quiero ayudarte”.
No volví la vista atrás, por las dudas… Mientras pensaba, que inmenso que es el mundo y en muchos lugares se repiten situaciones similares… Y pensar que hay gente que cae en estas trampas.

Por suerte olvide rápidamente el incidente cuando comencé a ver los alrededores de la catedral de Sevilla con sus mateos listos para llevarte a dar un paseo en carruaje. Esto  me trajo recuerdos personales, por lo que hubo un par de fotos, especiales para mi mujer, quien soñaba con llegar a la iglesia en un mateo con dos caballos blancos el día de nuestro casamiento. Anécdota aparte, estuvimos meses buscándolo para la boda, y no pare hasta tratar de cumplirle el sueño. Finalmente conseguimos una hermosa jardinera, con un reluciente caballo marrón, no era blanco pero si muy manso y dócil. Claro, la que debía lucirse era la novia, que ese día llego en carruaje al igual que Cenicienta y cumplió su sueño, que seguramente otras novias disfrutaran casi de la misma manera cuando su hombre las invita a dar un paseo en mateo por las calles empedradas de Sevilla.

¡Vamos los pibes!


Así termino cantando la hinchada argentina mientras transcurrían los últimos minutos de juego, mientras “los grandes” en el banco hacían bromas, sonreían, disfrutaban del momento y revoleaban las toallas mirando a las tribunas. Esa síntesis de emociones nos cuenta la historia del partido.
La expectativa que había despertado este choque no se cumplió. Senegal fue mucho menos de lo que mostró en sus juegos anteriores y Argentina fue más, demostrando una amplia superioridad. Entonces el partido fue muy desigual, friccionado por momentos, y con poco brillo. Y el mérito fue todo del vencedor, que hizo volver a la realidad a la sorpresa de este grupo, un equipo como Senegal, que por haber derrotado a dos equipos fuertes y con historia creyó que podía seguir soñando.
Desde el comienzo la premisa de Argentina fue defender duro, y eso hizo el equipo durante casi todo el juego. Fue un partido tácticamente perfecto, donde si bien por pasajes nuestra selección se quedó sin gol y el partido se tornó aburrido, los jugadores argentinos lo disfrutaron y mucho, porque por primera vez jugaron todos. Hubo quienes tenían ya pocas chances de jugar y hoy debutaron en el mundial, como Bortolín y Gallizzi, y que también convirtieron sus primeros puntos. También hubo pasajes en el segundo cuarto donde ya estaba en cancha un equipo surgido del banco de suplentes, y no tuvo inconvenientes en mantener la ventaja y estirarla. Eso le fue dando confianza al equipo y ya no importó quien estaba en cancha, había que defender y al funcionar ese aspecto, no había de que preocuparse. Senegal estaba cada vez más errático, perdía pelotas y ya no asustaba con su potencia física. Todos sus jugadores terminaron con valoración negativa, mientras que por Argentina en ningún caso fue así.

Importante victoria de nuestra selección que sigue sumando victorias y rodaje, esta vez jugando según lo planeado, lo cual reconforta, y con la alegría de que todos pudieron ingresar al partido. El grupo de jugadores así lo entendió y la gente también, y lo vivió el estadio en el momento que desde las gradas bajaba el “¡Vamos los pibes, vamos los pibes!”

La puerta de Andalucía


Visitar Sevilla es remontarse a los tiempos donde la corona española poseía colonias alrededor del mundo, épocas de calles empedradas y balcones de rejas con flores.

Recorrer esas callejuelas intrincadas que invitan a perderse y descubrir iglesias, conventos, pasajes sin salida y pequeñas plazoletas. Observar las construcciones coloniales y toparse con colores pasteles y casas recicladas, todo muy bien cuidado y en uso. Son construcciones de tres pisos a lo sumo, siempre del mismo estilo, que le dan un encanto único sobretodo por las noches, donde la iluminación realza el toque colonial del casco antiguo de la ciudad.
Pero también es encontrarse con palacios donde funcionan edificios públicos y museos. Y su palacio más importante es el llamado Real Alcázar de Sevilla, uno de los palacios en uso mas antiguos del mundo, una construcción hecha por los árabes en el siglo X como residencia de su gobernador, luego futuro palacio del musulmán Al Mutamid como rey de Sevilla. Porque no debemos olvidar que esta región de España, la de Andalucía, fue conquistada por los musulmanes, quienes estuvieron en el sur de la península ibérica por 800 años, dejando toda su cultura y como no, mezclando su raza con los españoles. Fue mucho tiempo para no influir totalmente en el sur de España.
Y podemos observar esto claramente en el Real Alcázar, palacio con típico tinte musulmán, desde el estilo laberíntico a sus fuentes, sus arcadas y sus patios y jardines. Una belleza para quien sueña con el cuento de las mil y una noches, y se imagina al califa recibiendo sus visitas, y su harem de mujeres oculto tras unas diminutas ventanitas en lo alto de la sala. Pasear por sus jardines y patios de naranjos nos transporta a otro momento, otra época que sin duda ha marcado el transcurrir de esta ciudad.
Estos palacios fueron tomados por los Reyes Católicos luego de la reconquista y la expulsión de los moros, quienes continuaron con la decoración del mismo utilizando como mano de obra a los artistas musulmanes pero con motivos religiosos católicos. El famoso estilo mudéjar que tanto se habla aquí por Sevilla. Una ciudad que todavía conserva las murallas antiguas del fuerte que le dan un toque distintivo y encierran barrios enteros dentro de su casco antiguo.
Tras el descubrimiento de America en 1492, Sevilla se convirtió en el centro económico del Imperio español. Los Reyes Católicos fundaron la Casa de Contratación desde donde se dirigían y contrataban los viajes, controlaban las riquezas que entraban de  America y regulaban las relaciones con el nuevo mundo.
Hoy con sus 700.000 habitantes muestra rasgos de modernidad en sus bares, comercios, tiendas y medios de transporte, pero la ciudad tiene ese encanto de hacernos creer que transitamos otro momento de la historia.

Este momento del año es un tiempo muy caluroso para visitarla, ya que las temperaturas durante el mediodía y la tarde alcanzan fácilmente los 40 grados, pero en Semana Santa o la Feria de Abril son momentos muy especiales para darse una vuelta por aquí, donde la religiosidad se pone de manifiesto y muestra al pueblo volcado a este tipo de celebraciones.

Pasear por la capital de Andalucía implica adentrarse en una provincia muy especial, conquistada por romanos, visigodos, árabes y reyes católicos, una mezcla de culturas que se siente paso a paso, caminando las empedradas callejuelas y perdiéndose en ellas, para soñar con la época antigua que encierran sus muros. 

lunes, 1 de septiembre de 2014

Sufrimos hasta el final


Se sufrió hasta los últimos segundos. Filipinas tenía la chance de amargarnos la tarde sevillana y complicar más  este grupo donde todos pueden ganar y perder. La defensa argentina no fallo en el último ataque rival y nuestra selección se llevo un triunfo importantísimo y necesario de cara al futuro.
Con un gran clima, ya que los simpatizantes de ambos países prácticamente llenaron el estadio, se disputó un emocionante juego donde las idas y vueltas del partido le iban dando protagonismo a las silbatinas de los filipinos, a los cantos tribuneros de los argentinos, al agitar de banderas de uno y otro lado.
Tanto en las tribunas como en la cancha, fue un partido cambiante, con rachas de ambos equipos, donde nuestra selección se sintió incómoda desde el comienzo. Los filipinos mostraron un juego rápido y atlético, y mientras convertían desde posiciones exteriores iban al frente en el marcador. Cuando Argentina ajustó la defensa y logró que perdieran efectividad, se puso en juego y hasta lo dio vuelta. Ofensivamente Lamas probó diferentes opciones hasta que fue logrando que el equipo funcione mejor, sumado a unos robos del final de la primera mitad emparejó el juego y a partir de ahí lo controló.
De a poco la ofensiva argentina fue fluyendo con gran aporte de Mata y con la conducción de Laprovítola que le puso claridad al ataque. Pero se sabía que ante este rival no había que confiarse, y Argentina se confió cuando sacó 15 puntos en el tercer cuarto. Tampoco fue positivo que quedaran en cancha los mismos jugadores que iniciaron el último cuarto, ya que sobre el final, cansados por el esfuerzo, no tomaban buenas decisiones en ofensiva y fallaban en la ejecución. Y Filipinas que siempre intentó y nunca decae, se acerco tanto pero tanto que hizo dudar hasta los santos.

Fue un partido donde Lamas ensayó variantes, tuvieron muchos minutos hombres que no lo hacen habitualmente, y el equipo respondió de a ratos. Argentina supo salir del enredo  inicial, fue encontrando ofensivas y cumplió defensivamente. Tenía que ganar y así lo hizo, ante un rival molesto y luchador. Ahora deberán reponer fuerzas para encarar los partidos finales del grupo que serán los más importantes.