Una
ceremonia inaugural de excepción, divertida, con acrobacias muy bien
ejecutadas, con ritmo y si bien, como en toda ceremonia, no es nada fácil
llegar a una explicación lógica de su significado por el solo hecho de verla,
lo que se observo en la gente que cubría las gradas fue entusiasmo, lo cual
contagió y mantuvo en vilo a la concurrencia durante el desarrollo de la misma.
No hubo
discursos, fue corta y contundente. Buen comienzo para este 45 Campeonato
Sudamericano de Selecciones Mayores.
Si bien ya habíamos
disfrutado del básquet de Venezuela 86 – Chile 61 , Uruguay 122 – Bolivia 36 y
el emotivo Brasil 67 – Paraguay 63 , el plato fuerte estaba por venir : la
selección Argentina enfrentando a Colombia.
Y la
selección argentina no defraudó, ya que si bien comenzó dubitativa y con muchas
pérdidas ( llegó a perder por 25 – 20 ante un rival en teoría inferior),
gracias a una ráfaga tremenda de Campazzo en el segundo cuarto ( 20 puntos en
la etapa, 18 seguidos) nuestra selección se acomodó en el juego y cerró el
cuarto por 46 a
36. Ese despegue en el tanteador logró relajar a los jugadores que comenzaron
bien el segundo tiempo y mostraron su agresividad defensiva ante un Colombia
que comenzaba a desmoronarse. Por eso el cierre del partido fue a toda
orquesta, donde solo faltando pocos minutos el público se levantó y comenzó a
alentar a una selección argentina que terminó ganando 87 a 68.
Buen
comienzo de Argentina, con nervios al comienzo, mostrando su potencial sobre el
final, por eso habrá que esperar para ver a este equipo en su mejor versión.
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